Aniversario. Festejos y libertad

Aunque no los haya alertado en la más mínima medida, hace casi un mes que no escribía. La verdad no sé muy bien porque, pero bueh, acá estoy de nuevo. Como también saben, hubo días muy importantes durante mi hiato literario, que voy a pasar a repasar.
Vamos primero con lo más relevante y que seguro también los tuvo de protagonista. Los 200 años de la denominada, vaya uno a saber por quien, "Revolución de Mayo".
Antes de que se agarren la cabeza o cierren la ventana, les aclaro, NO, no los voy a lecturar sobre la fecha. Sólo me gustaría, que aunque todos piensen saber que pasó, sigan leyendo y analizando los hechos, se van a llevar mas de una sorpresa seguramente. Soy un acérrimo activista-practicante del revisionismo histórico, contrastando fuentes y haciendo análisis propios.
Me gustaría resaltar a un, a mi parecer, personaje menospreciado (quizás escondido por la "historia oficial") e ideólogo principal y visionario del movimiento independentista americano, Mariano Moreno. Educado en América pero influenciado por las mentes europeas del Iluminismo, sus ideas fueron claramente independentistas, republicanas, acompañadas de las que podríamos llamar democratizadoras y socializadoras, aún cuando esos conceptos nos suenen a cierto desfasaje temporal. Sin duda el "distinto" entre los integrantes de ese 1º Gobierno Patrio, un adelantado a su época siendo el primero en imaginar una "Argentina" y tener un plan de desarrollo y justicia. No quiero abrumarlos con información ahora pero les recomiendo se informen sobre él. Creo que es la mejor manera de reivindicar su figura y espero de levantar sus ideales y hacerlos nuestros.
Sobre los festejos y aunque no es para justificarme, quería escribir sobre, una vez ya concluída para poder tener aún mas material para analizar. Los 4 días que duraron los festejos principales en la 9 de Julio, hubo un desfile de gran cantidad de artistas populares, así como de las colectividades presentes en nuestro suelo y uno escueto de las Fuerzas Armadas, acompañado en el cierre por un espectáculo ambulante de la compañía "Fuerzabruta", que si bien no son de mi gusto, demostraron un despliegue y una articulación de conceptos con su particularidad realmente remarcable. Estaban presentes también pabellones dedicados a las provincias que hicieron un esfuerzo moderado y modestamente satisfactorio de acercar lo que los porteños llaman "el interior" del país.
El hecho mas destacable fue sin duda alguna la reapertura del Teatro Colón. Luego de años de abandono y desatención, y mas de 3 de cerrado (que incluyeron el festejar SU centenario), fue puesto en valor y reabierto con una velada digna de su pasado. Más allá de los problemas suscitados, el "chiquitaje" y las faltas al protocolo y las formas propias de los gobernantes, es emocionante el recuperar un ícono de la cultura mundial (catalogado entre los 5 mejores teatros del mundo). Es una leyenda viva, testigo y anfitrión de maravillosos artistas en su interior, como de atrocidades y personajes no tan felices en su exterior, y como tal debe dársele el valor correspondiente. Yo concurrí a esta reapertura, viendo el espectáculo desde la esquina de Tucumán y Cerrito y valió la pena por cada vez que tirité con ese frío que nos quería correr. Tuve la suerte de concurrir antes de su cierre a una función del "Requiem" de Verdi y tengo en mente regresar para apreciar otra vez su arquitectura y su acústica.
Esa misma noche canté junto a miles más nuestro himno (que por cierto cumplió 187 años como máxima canción patria el 11 de mayo) cuando dieron las 12 y el nuevo 25 empezó. Aparte de ser una excelsa obra de arte nuestro himno, como lo referenció mi amigo Santiago, me alegró que algo nos una a todos, aunque sea por sus breves 4 minutos.
Aunque la mayoría de los artistas no eran de mi agrado musical y no me vi impulsado a concurrir, es destacable la cantidad de gente que si lo hizo, que siendo cautelosos estuvo en el millón. Poder salir a la calle en masa, sin miedo, sin preocupaciones, festejando todos juntos, por lo menos un rato de alegría y esparcimiento para los tan golpeados ánimos nacionales. Recomiendo leer esta nota de Lanata sobre el tema.
Es inocente pensar que los dirigentes no esperaban sacar réditos de estos actos, de hecho ambos lo demostraron con sus actos egoístas, sin embargo, aunque consiguieron un efecto positivo en sus imagenes, la volatilidad de este sentimiento nos permite declarar la maniobra un fracaso.
Me dejo un gusto amargo el hecho que ver todo vaciado de contenido, vaciado del fondo que deberíamos estar reivindicando.
Al fin, la comparación con los festejos de hace 100 años se nos hace casi obligatorio y son muchos los ángulos desde los que uno puede abordarlo.
En lo social es destacable el progreso y transformación de la sociedad civil, aunque podemos encontrarnos con que los poderes, tanto económicos como políicos, continúan concentrados en oligarquías y oligopolios. A la vez el país sigue siendo el lugar rico y con esa riqueza injustusatamente distribuída al igual que hace 100 años. Esa ventaja de abundancia natural no se extinguió, por lo que la posibilidad de una Nación grande y próspera es todavía posible.
En la frivolidad de los festejos, podemos comparar el desfile de Avenida de mayo del Presidente Figueroa Alcorta con la caminata por la Plaza de Mayo de la Presidenta y las diferencias son evidentes. En el sentido de los recordatorios, muchas colectividades donaron obras para honrar este hecho y embellecer nuestra ciudad, esta vez lejos estuvimos de eso, con sólo la reinauguración del Colón y un monumento proyectado que nunca pasó de las maquetas, adornado con algunos gestos menores (El Empire State con los colores nacionales y un astronauta japonés de la E.E.I. mandando saludos por Twitter). A la vez no hubo representantes de naciones extranjeras fuera de los del cono sur, lo que significa un cambio de esa Argentina mirando a Europa. En otro momento voy a analizar eso con mas profundidad.
En fin, luego de estos 200 años, y si bien no es el nacimiento de la Argentina sino que podría considerarse su concepción, acá estamos. Saber de donde venimos, nos hace honrar nuestro presente y soñar nuestro futuro, superándonos, retomando los ideales que hicieron a nuestra Nación grande y asegurarnos de que por lo que quede de tiempo humano, va a haber un hermoso lugar llamado Argentina.

Sin mas que decir, ¡¡¡VIVA LA PATRIA!!!

Les dejo un interesante recuento multimedia hecho por el diario La Nación on line y un especial de Nat Geo.